lunes, 4 de junio de 2012

¿ Se creen que somos tontos o pollos ?

Hace unos días tuve que acudir a la UBS de Cala D´Or a la consulta con mi médico. Por suerte, mi salud me ha respetado estos últimos años y hacía bastante tiempo que no pasaba por allí. Tenía cita a las 13:30 y llegué unos minutos antes, por lo que tuve que esperar pacientemente.

Creo que fueron los peores 20 minutos de mi vida, jamás los olvidaré. El calor que hace en el pasillo principal de consultas es asfixiante. ¿ A qué genio de la arquitectura moderna se le ocurrió pensar que esos enormes ventanales orientados al sur no serían un problema en un lugar como Mallorca ? Los comentarios de todos los que estábamos allí esperando, entre resoplo y resoplo, iban encaminados a maldecir a este señor.  


Cristaleras fachada sur del UBS Cala D´Or y detalle de las piedras colocadas en las farolas

Está bien, no pasa nada, fue un error de cálculo en un proyecto que sólo nos costó 1,1 millones de euros. Lo más lamentable de este grave fallo es que aún, casi tres años después, no se le halla dado una solución. El mismo día de su inauguración nuestro maravilloso alcalde de Santanyí, Miquel Vidal, reconocía en la prensa escrita que "este problema ya está siendo estudiado por los arquitectos para darle una solución temporal". Tres años después la solución no ha sido ni temporal ni definitiva, el centro médico de Cala D´or es un auténtico asador de pollos. ¿ Tan complicado es poner unas cortinas o estores que aminoren el sufrimiento de los ya aquejados pacientes ? ¿ Para esto tenemos arquitectos e ingenieros asalariados en el ayuntamiento ? Está claro que es que tienen mucho trabajo y no dan a basto... Pobrecillos.



Suponemos que Miquel Vidal y el resto de la comparsa que lleva una semana haciéndole la pelota pueden permitirse, gracias a sus generosos sueldos, ir a un médico de pago donde haya aire acondicionado. Los demás, los que somos tontos y nos dejamos engañar tan fácilmente, seguiremos cruzando los dedos para no coger nunca un resfriado y tener que pasar por el calvario de ir a ver a nuestro médico.

Cuando me dirigí a recoger mi coche me fijé en otro pequeño detalle que muestra cómo se hacen las cosas en este pueblo. Alguien, se supone que los "caminers", han colocado una serie de piedras alrededor de las farolas para que ningún coche las golpee. El aspecto que dan es lamentable, hay que tener muy poco gusto para hacer esa chapuza un edificio nuevo que nos ha valido un dineral a todos los contribuyentes.

Fuente imagen periódico: Blog del Municipi de Santanyí

Un saludo

2 comentarios:

  1. Uno no sabe ya si reir o llorar... propongo hacer una colecta y entre todos comprar unos estores en Ikea.
    Saludos!

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  2. Patetico ! como siempre todo en plan "prehistorico" bueno.....todo no, los impuestos que nos cobran y sus sueldos NO !

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